miércoles, 20 de abril de 2011

67



Los años. O 67: el año.
El de Estudiantes. El de "la primera vez" de los que la jugaron por afuera y la remaron contra todo; contra los Boca y los River, los que por mandato ganaban a fuerza de árbitros, nacionales o extranjeros, a fuerza de ser "los elegidos": "Los chicos", como lugar común para muchos.
Hubo una tarde. Fundacional. Una que prefirió espiar hacia otro lado. Primero, clasificación y paseo a Gimnasia: 3 a 0 y a semifinales. Después, el eterno 4-3 a Platense. Goles ahí y en la final, la primera de todas, en la histórica goleada a Racing del Gasómetro. El mismo rival al que le recordamos con ironía qué es eso de "padres e hijos".
Y vendrían varias. Muchas. Inéditas para los tiempos que corrían. Acostumbradas, luego. Con Racing también, justo Racing, ese del invicto, de José, Perfumo, Basile y el Celtic; el campeón del mundo. Y vos ahí, para hacer bronce, cuando ni pensabas que tu apellido cruzaría la frontera 40 años y se grabaría en esos brazos que le ofrendaron al cielo la Copa en el Mineirao.
Y la Libertadores, la del '68, el año del Mayo Francés, los Beatles... la contracultura, las verdades demolidas... y Estudiantes. Sí: Estudiantes en la historia. En ese empate que fue victoria en el Monumental con tu chilena, cabalgando y aguantando el empuje de los que se creían invencibles y cayeron vencidos. Una vez más. Por vos y diez más que nos llevaron a la inédita final contra el Palmeiras de San Pablo.
Y ahí, sí. No hay videos ni imágenes que puedan ponerte a la par de aquel grito de Maradona a los ingleses con Víctor Hugo de fondo. Sólo algún recuerdo cuadro por cuadro blanco y negro de El Gráfico y no mucho más. O sí: el boca en boca de los que estuvieron. El boca boca de padres, abuelos, tíos mayores. La noche que nos tatuamos eso de "la mística" que ahora quiere ser monumento, la del 0-1/2-1 en siete minutos en los tablones de 57 y 1. La que cuentan los padres como ese inequívoco relato de medianoche.
- Vos no lo viste.... yo sí.
- Pero lo vi a la Bruja....
- La Brujita. Este es "Bruja". Y mirá: gambeteó, pasó a uno, a dos, de derecha a izquierda... los colgó a todos en la escoba. Fue Maradona antes de Diego; fue el gol a los ingleses antes de México. Y fue la Copa. La primera de todas. Antes que todos los "grandes". Antes que Boca, antes que River. Fue Verón. Fue la Bruja. Es Verón, la Brujita. Estudiantes. ESTUDIANTES, flaco, así, con mayúsculas.